Sabiduría y amor
Quizás ella ya esta cansada. Tal vez para ella, simplemente, ya fue suficiente. Puede ser que ella crea que ya no hace mas falta, ignorando lo útil que todavía es en nuestras vidas.
A veces puede ser que me sienta irritada. Que no entienda que los años traen complicaciones, y que no me dice por gusto que hable más fuerte porque no me puede escuchar. Puede ser que haya historias que no quiera escuchar mas, y que me moleste que se olvide de cosas que dije momentos atrás.
En mi vida veloz, hay veces que me aburre su lentitud, que me cuesta entender sus tiempos, como a ella le cuesta entender los míos.
Pueden ser una y mil cosas mas, excepto... que ya no la necesite más. Porque es una de las mujeres mas importantes de mi vida, porque es todavía la que me enseña las cosas que me forman. Porque la quiero. Porque no me imagino todavía mi vida sin ella. Porque 92 años no son al divino botón. Significan experiencia, sonrisas, lágrimas, vida y amor. Amor incondicional. Amor como pocos. Innumerables recuerdos, infinitas anécdotas y cantidad de encuentros.
Todavía me escucha contarle de mis problemas existenciales típicos de mis 20 años. Me sorprendo al ver que, muchas veces, me entiende más que las personas que tienen mi edad. Me da risa acordarme su sinceridad al conocer alguna amistad mía que no le llegó a gustar. Un café con ella a las 5 de la tarde en su casa, es una rutina de mi vida que me sigue dando el mismo placer que cuando comenzamos a hacerlo.
Me cuesta comprender a las personas que tienen la misma oportunidad de disfrutar de sus abuelos que yo, y no lo hacen. No pueden lograr ver el regalo que es escuchar y disfrutar de la sabiduría y el amor que pueden trasmitir estas personas que vivieron tanto más que nosotros, y que hoy nos necesitan más que nunca. Los hijos que se olvidan que ayudar a caminar a un mayor, acompañarlos al medico, y hasta ayudarlos a comer es solo una parte de lo que ellos hicieron por nosotros cuando éramos chicos y no lográbamos hacer nada por nuestra cuenta. Me cuesta vivir en una sociedad que les da la espalda a los abuelos, ignorando los sabios que nos podemos volver abriendo más nuestros oídos, pero por sobretodo nuestro corazón para escuchar lo que ellos tienen que decir.
Hoy ella esta triste, y yo comparto su dolor. Se le fue una compañera más de su camino. Se imaginaran que a los 92 años ves partir a muchas personas de tus afectos, y te toca despedirte de varios amores en tu vida. Vas perdiendo gente, gente que creiste tener con vos para siempre, pero como ella me dice siempre "también llegué a conocer a personas que jamas creí conocer". Aún así ella sigue acá, conmigo, de pie viviendo lo que es su último trayecto de vida. Compartiendo todavía algunas vivencias con sus nietos y sus hijos. Viendo cambiar continuamente lo que fue su país, alegando todo el tiempo que en "su época" se vivía mas tranquilo. Esta asustada, le da miedo pensar que va a dejar a sus afectos en un mundo que gradualmente esta perdiendo sus valores y que esta dejando de darle importancia a las pequeñas cosas... pero yo trató de ser positiva, le regalo una sonrisa y le digo todos los días que se quede tranquila, que vamos a estar bien, porque la tuvimos de maestra y ella nos enseño, por lo menos a nosotros, lo que SIGNIFICA EL AMOR...