Saturday, May 05, 2007

Lejos

Ahí estaban. Se podría describir lo que sería, para muchos, una noche perfecta para un reencuentro de dos ex. Lluvia, vino, cigarrillos y amigos. Sin embargo no se porque ellos tienen un gusto amargo, que lejos de ser algo tan esperado, fue algo raro. Ella siempre creyó que sus rodillas iban a tener un movimiento tembladizo en el momento de encontrarlo, pero por el contrario se mantuvieron firmes y cruzadas por abajo de una mesa menos estable que ellas. Él, por su lado, tenia ganas de acercarse y ver que había sido de su vida pero algo lo frenaba a hacerlo. Podría haber sido miedo, vergüenza o simplemente ya una falta de confianza. Muchas miradas otra vez se volvían a posar en ellos.
Una comida amena entre amigos y un ex se convirtió después en un juego de cartas y algunas copas de vino que ella tomaba para calmar sus miradas. Un lugar conocido, visitado por ellos anteriormente. Una baulera con historia y una casa con anécdotas. No podía evitar sonreír para si al pensar en ese recuerdo de dos personas queriendo jugar.
Para ella, definir una situación rara, no es definir una situación mala. Aunque por momentos le pareció triste, su lado positivo de pisciana la hizo sentir que gracias a Dios el enojo y la mezcla de pasiones, no se habían asomado para quitar calma.
Miradas que reemplazan a la retorica. Gestos que decían mucho y palabras que no decían nada. Pero ahí estaban otra vez... Frente a frente en una conversación cotidiana. Sumándole un nuevo recuerdo a una historia terminada.
Era inexplicable lo que todavía les sucedía. Después de un par de años de haber terminado una relación, que dejo en claro que eran una aparente buena idea pero que llevada a la practica no era rentable ni funcionaba, todavía se seguían interesando en el otro. Las frases hechas que escuchaban a diario como "cuando se termina, se termina" no servía para ellos. Había algo mas allá de lo que la razón podía entender. Algo indefinible después de años de diferencias con abundantes problemas y escasez de soluciones. Algo con el que el tiempo se estaba divirtiendo, exponiéndolos a situaciones peculiares y extrañas. Mezclando causalidades con casualidades. Jugando con la duda y las señales. Uniendo y separando. Jugando con la piel y también con su vulnerabilidad a caer.
No entendían, como y por que, pero siempre volvía uno tras el otro. Sin entender si era necesidad o deseo el hecho de querer saber que era de sus vidas, si estaban bien, si estaban contentos, en fin... si eran felices. Todo eso siempre terminaba siendo mas fuerte a cualquier desencuentro o diferencia que pudieron haber tenido en el pasado. ¿Seguiría así con el paso de los años? ¿o por fin esto es el indicio de una amistad que quizás mañana los convierte en dos extraños?
Dos personas que se adoraron.. caminando de la mano acompañados, elegirían dos caminos diferentes retando el destino y quizás a algo mágico. Sus camas estaban ya ocupadas y no había lugar para nada mas. Las cosas así se habían dado. Sin embargo esas miradas expresaban una conexion paranormal.
¿Qué los mantenía, a través del abismo que los separaba, todavía unidos? ¿El cariño, la piel o solo un grupo de recuerdos que servían para hacerle honor al pasado? ¿Lo que pudo haber sido? ¿alguna deuda por pagar? ¿O simplemente alguna amistad pendiente?
Estamos hablando de dos personas que compartieron mas que un lado de la cama y que hoy, sin tener necesidad de mantenerse en contacto, pero que por voluntad propia, o porque el destino siempre se los impone terminan frente a frente sabiendo que tal vez ahí, escondido, hay un lazo muy especial queriendolos aún sorprender.

1 comment:

Anonymous said...

LUZ, el amor es tan maravilloso como inexplicable, y si una vez se lo sintió con toda intensidad, es probable resurja de entre las cenizas con más intensidad que antes.
Te estoy escribiendo desde mi nuevo blog, que trata temas menos mundanos, y más espirituales. A los otros los actualizo permanentemente.

Besos!
Charly W. K.