Son pocos y valen mucho
Existen personas que pasaron por nuestra vida sin darnos cuenta. Existen personas que estuvieron y que alguna vez las creímos importantes, y hoy no están más y no son más que un vago recuerdo o una experiencia, o lo que es peor un simple momento. Existen personas que de las que ni memorias tenemos. Existen personas que nos dejaron enseñanzas, moralejas, o huellas que vamos a llevar siempre con nosotros, pero que las circunstancias de la vida hicieron que como llegaran se fueran, y que hoy simplemente no están más, y ya no contas con ellas. Pero, gracias a Dios, existen las personas que estuvieron, están y estarán siempre, sin excepción, con nosotros.
Compartiendo tu camino, compartiendo tus alegrías, compartiendo tus tristezas, compartiendo tus éxitos y compartiendo la vida. Se convirtieron en tu apoyo, en tu confianza, en tu seguridad y en tu sexto sentido. Los dejaste entrar tanto en tu vida, en tus cosas y contribuyeron tanto a tu felicidad que hoy sos una parte mas de cada uno de ellos. Quizás a varios los conozcamos desde hace muchos años, puede ser que te hayas criado con mas de uno, o quizás los conociste hace mucho menos pero su paso por tu vida hizo tanto ruido que ya ni te acordas del tiempo. Esas personas que están, no importa la hora, no importa el lugar, no importa el por qué... siempre podes contar con ellas. Los que no te exigen nada a cambio, los que no esperan nada a cambio. Los que son sinceros, dicen las cosas sin tapujos, sin mentiras, te miran, te dicen lo que piensan y sienten, sin obviar o suprimir. Con los que no conoces la decepción, porque jamás harían algo que te lastimaría, y la razón es tan simple como increíble, ellos te quieren...
Son tus amigos, de los que habló, son mis amigos por los que escribo. Son los afectos, las personas que no te impusieron nunca, sino que vos las elegiste para formar tu círculo de confianza. Las personas que separaste de tu vida social, para hacerlos entrar a tu mundo, a tu historia, a tus anécdotas, a tus sueños y a tus proyectos. Las personas que sobreviven al tiempo. Las personas que conocen tus gestos, tus sonrisas, tus días malos, tus días buenos. Las personas con las que no necesitas palabras para expresarte, solo basta la mirada para que te acompañen.
Las personas que llegan a tu casa y te la dan vuelta en un instante con la confianza de un hermano. Ellos te miran y no dudan en decirte lo mal que actuaste, pero tampoco dudan en felicitarte por las metas que alcanzaste. Te suben el animo, y te recuerdan todos los días que las personas no están solas, que uno puede elegir vivir solo, uno sobrevive a la soledad, pero... ¡cuanto mas feliz es uno acompañado! Que alegría y confianza me da saber que cuento con un grupo de gente que nunca me va a dejar sola. Desde travesuras infantiles, hasta la perdida de un ser querido, ellos estuvieron siempre ahí, siguiendo tus pasos. Con ellos, te animas a hablar del futuro, con el color con que lo quieras expresar, no te dan vergüenza ni tus proyectos, ni tus sueños, aun siendo conciente de los excéntricos que pueden parecer, con ellos este todo bien.
A Jorge Luís Borges cuando le tocó hablar del tema rescató la gran ventaja que tiene la amistad: "el amor exige continuos milagros, exige reciprocidad. Si uno deja de ver a una persona por unos días se puede llegar a sentir muy desdichado. En cambio, la amistad puede prescindir de la frecuentación, es algo mas intenso".
Ellos se pueden separar por diez años, y encontrarse en un café de nuestra Buenos Aires y se van a mirar, y van a comprender que para un amigo, el tiempo es un instrumento que se toca aparte, tiene música y letra propia, en cambio la amistad verdadera esta ahí, intacta, siempre con la misma melodía.
4 comments:
Hi Luz:
Llegué a tu espacio a través del blog de Mística. Por tus palabras allí sé que no eres muy amiga de compartir pensamientos íntimos con el resto, pero si te sirve de algo te diré que me es muy grato leerte y me anima a escribir y a que mis inquietudes se tornen transparentes a través de la Red. ¡Quizás la ciber-cercanía nos permita saber que hay más gente a este lado!
Chau
Muchas gracias por leerme. Para mi esto es algo muy nuevo, recien estoy entendiendo el concepto que tienen las personas sobre los blogs. La cantidad de cosas que lei en estos ultimos dias por distintos blogs, me resultaron increibles y llamativas. Me alegro que te guste lo que escribo y que sea una iniciativa para que vos lo hagas. Mucha suerte y gracias!
Hola luliiiiiii, llegue a casa y vi un mensaje que me pedia que lea tus nuevos trabajos y te comento que este me gusto mucho, pero para cerrarlo, me gustaria dejarte una cancion de Serrat que creo va muy acorde;
Decir amigo
es decir juegos,
escuela, calle y niñez.
Gorriones presos
de un mismo viento
tras un olor de mujer.
Decir amigo
es decir vino,
guitarra, trago y canción
furcias y broncas.
Y en Los Tres Pinos
una novia pa' los dos.
Decir amigo
me trae del barrio
luz de domingo
y deja en los labios
gusto a mistela
y a natillas con canela.
Decir amigo
es decir aula,
laboratorio y bedel.
Billar y cine.
Siesta en Las Ramblas
y alemanas al clavel.
Decir amigo
es decir tienda,
botas, charnaque y fusil.
Y los domingos,
a pelear hembras
entre Salou y Cambrils.
Decir amigo
no se hace extraño
cuando se tiene
sed de veinte años
y pocas "pelas".
Y el alma sin mediasuelas.
Decir amigo
es decir lejos
y antes fue decir adiós.
Y ayer y siempre
lo tuyo nuestro
y lo mío de los dos.
Decir amigo
se me figura que
decir amigo
es decir ternura.
Dios y mi canto
saben a quien nombro tanto.
Besos
Ahora me asegure totalmente de que me leias!! Gracias!! La cancion es perfecta, ya la conocia. No sabes que feliz que me pone que a las pocas personas que conocen mi trabajo y lo que escribo, les guste...! Gracias sos y seras siempre un buen amigo!
Besotes!
Post a Comment